Percepción del dinero en relación con la felicidad

Por: Estefani Escobar Tovar
[Estudiante de Diseño Visual – Institución Universitaria Colegio Mayor del Cauca]


Hablar de dinero en general y hacer preguntas como: ¿Cuánto le pagan en su trabajo, o cuánto le costó esa nueva camioneta? Es considerado como una falta de respeto, igual, a otros tabúes de nuestra cultura, debido a esto si a alguien le preguntan ¿Da el dinero la felicidad? Respondería sin pensarlo demasiado, no, el dinero no da la felicidad, yo soy feliz con que mi familia esté bien, u otra alternativa es: no, porque el dinero no puede comprar cosas como el tiempo en que me divierto con mis amigos. Se tilda a quien piense lo contrario de interesado o materialista. Sin embargo, debemos analizar más razones que enmarcan la variable dinero y felicidad para llegar a una mejor conclusión, que aquella primera solución que codifica nuestra mente.

El sistema económico capitalista en el cual nos encontramos inmersos, inconscientemente nos hace creer que la persona que tiene solamente lo necesario para suplir las necesidades básicas, tendría una vida infeliz, debido a que a pesar de que pueden pagar cosas como una vivienda, o la comida, no pueden tener lujos que para otras personas son comunes, como lo llegaría a ser un carro, viajar, descansar los fines de semana, y hasta la educación. Pero es que, para cada uno de acuerdo con su contexto, sustantivos como la felicidad, la riqueza, necesidad y capricho, tendrán significados y ejemplos de que son, notablemente diferentes.

Experiencia sujeto a sujeto

Captura de Instagram

Para muchos la misma sociedad y el sistema económico nos obliga a comprar la felicidad, y es que quién diría que es feliz, si no tiene pagar los recibos, un techo fijo en el cual se sienta seguro y pueda descansar, o si el banco le roba su tranquilidad con llamadas constantes sobre quitarle los pocos bienes que le quedan. Pese, a las situaciones más adversas que rodeen a una persona, si nos basamos en el conocido “Ser feliz es cuestión de actitud” podríamos ser felices siempre, solo con cambiar nuestra disposición frente a cómo percibimos las cosas, como si la felicidad funcionara como el suiche de encender un bombillo, tan irrisorio, como el típico “El que es pobre es porque quiere” o aquella frase del cantante colombiano de reggaeton JBalvin “La pobreza es mental”, se puede llegar a pensar que la frase quiere motivar para trabajar por lo que se quiere conseguir. Pero también a estas cosas me refiero al decir, que tenemos significados diferentes y contextos desiguales, parece que a pesar de crecer en el mismo país y compartir rasgos culturales, viviéramos realidades totalmente diferentes. No me imagino a nadie diciendo: -hoy no tengo para comer, pero me da pereza salir a trabajar o no tengo para pagar los recibos, pero es que esta es la vida que me tocó.

Al querer llegar a conclusiones rápidas, que conllevan a ideas mayormente erróneas, y en un país profundamente marcado por el narcotráfico, se cree que cuando una persona nació con las necesidades básicas hablando de manera central, en lo económico y pasa a tener algunas cosas materiales que no son típicas de aquella clase social donde se formó, se tilda a la persona de estar lavando plata, parece que en nuestra sociedad “democrática e igualitaria” es difícil creer que quien estudie, trabaje y se esfuerce, no puede mejorar su capacidad económica, al estilo griego, estamos marcados a vivir en la miseria sino se ha nacido en cuna de oro. Pero, esas cosas materiales, que muchas llegan a envidiar son o deberían ser comunes.

Ilustración de Estefani Escobar Tovar

En la película “En busca de la felicidad” del 2006, mientras nos relatan la historia de un hombre que debido a la falta de ingresos económicos; rápidamente pierde a su esposa, queda sin casa por no pagar el arriendo, y hasta en el día que tiene su entrevista para aquel empleo añorado, lo llevan a la cárcel por no pagar las infracciones que cometió con su anterior carro, todo lo anterior demuestra la desigualdad social en la que vivimos ensimismados, ignoramos realidades ajenas. A su vez, el protagonista durante gran parte de la película debe cargar en una mano con aquella máquina que es su sustento, que podría simbolizar ese pasado, el cual lo ha conducido a aquel terrible presente, y en la otra llevaba a su hijo, que demuestra lo que lo impulsa, ante tantas adversidades, él es su principal razón para seguir luchando, para seguir buscando la felicidad.

Recolección de datos empíricos

Les contaré el ejemplo de doña Carmen, quien desde hace aproximadamente 8 años viene a la casa de mi vecino y le ayuda con el aseo de la misma, ella tiene cinco hijos, vivían en una casa muy humilde a orillas del río, pero después de ahorrar el dinero de su trabajo, más el que sus hijas mayores ganaban por estar también trabajando en la misma labor de doña Carmen, pudieron comparar una mejor casa, y mientras para la mayoría tener una casa construida con ladrillo o con techo de zinc, doña Carmen casi lloraba aquel día que nos contaba todo lo que tuvo que hacer para poder adquirir y adecuar su nuevo hogar, lo que quiero decir, es poner de nuevo en conversación aquella idea dada por Fernando Savater, de que aunque no somos libres de elegir lo que nos pasa, si somos libres de reaccionar ante ello, y que muchos somos más consientes de las cosas que limitan nuestra libertad, a que somos realmente libres.

Aporofobia

Ilustración de Estefani Escobar Tovar

Damos por sentado muchas cosas, como tener una casa de ladrillos, a la vez no somos conscientes de lo que podemos lograr con nuestras relaciones sujeto a sujeto, algunos somos egoístas, y vivimos en una sociedad en la que día a día se nota la aporofobia. Este término creado por Adela Cortina (2018), para darle nombre a esta realidad, tan ignorada, que busca visibilizarla, y es que como ella plantea, en un ejemplo tan acertado a nuestro contexto, en nuestras relaciones sujeto a sujeto; no le tenemos fobia a aquel extranjero que viene con mucho dinero, a montar una multinacional que le haga competencia a los emprendimientos locales, por el contrario, se deshumaniza, y se tiene fobia al extranjero que viene huyendo de realidades adversas principalmente por situaciones económicas, buscando un mejor provenir en nuestro territorio. Aquí podríamos hablar de la resistencia que se tiene hacia las personas pobres, como se cree que ellos no son capaces de darnos algo, los excluimos, muchas veces hasta los deshumanizamos, dejamos de pensar en las personas en situación de calle, más allá de eso, no nos planteamos quien son, que les paso, solo sabemos que son gente de calle y nada más. Nosotros como sociedad tenemos el poder en conjunto de erradicar esta fobia tan preocupante.

Esencialismo y circunstacialismo

Muchas veces como mencionaba el autor Estanislao Zuleta, “Torcemos lo que queremos saber para no ver la verdad”, él nos invita a dejar esa vida “plana” que no nos exige nada, analizar el trasfondo de las cosas. De la misma manera, hace una invitación a dejar de utilizar la “no reciprocidad lógica” engañamos a los demás y a nosotros mismos, defendiendo nuestra postura justificando que las circunstancias nos llevaron a cometer determinado error, el otro (definido por el filósofo Dario Sztajnszrajber como lo que excede todo lo que no soy yo) es malo por naturaleza, él tenía diferentes alternativas y eligió hacer el mal, sin embargo, aplicando el circunstancialismo, todo tiene excusa o disculpa. En el dinero se ve cuando las personas que han logrado consolidar un capital, se ufanan de haberlo logrado por sus propias capacidades, pero también podemos ver que personas con las mismas capacidades, o tal vez mayores, no lo han logrado surgir por falta de apoyo, oportunidades, y recursos económicos.

Es decir, son muy diferentes las oportunidades que tiene una persona que le encanta jugar al tenis, al fútbol, tocar el piano demás, viviendo en una ciudad capital, a alguien que viva en un pequeño municipio al sur de Colombia, y en un país como en el que nos encontramos plagado de cultura del privilegio y la trampa, es común saber quién consiguió un mejor empleo, y así obtuvo un buen salario, gracias a su “padrino político”, o diferentes “palancas”, para solventar sus problemas económicos.

Consideraciones finales

Al finalizar este ensayo, me he percatado de que cuando las personas apenas cubren sus necesidades básicas, son felices cuando pueden lograr el objetivo de solventar las mismas, cuando logran pagar los recibos, educar a sus hijos, tener un hogar propio, son inmensamente felices. Sin embargo, cuando uno tiene aquellas cosas asumidas, sus ambiciones pasan a ser tener lo que tiene el otro, comparar cuanto dinero tiene el otro, a donde fueron sus últimas vacaciones. Quien envidia, a su vez se ve afectado por el rencor, y de paso se llegará a ver un tipo de tristeza, caracterizada por el odio, que le hace perder la felicidad.

El dinero da bienestar, más no la felicidad, y aunque la anteriormente mencionada, no sea como aquel suiche de la electricidad para decidir en que momento encenderlo, si podemos a través de nuestras experiencias sujeto a sujeto y sujeto naturaleza, ir construyendo desde la cotidianidad la misma, dejando de pensar que para ser felices debemos tener una vida de ensueño, disfrutando los pequeños detalles en cada uno de los campos que conforman nuestro vivir, del mismo modo, apreciando a quienes nos rodean, poniéndonos en su lugar, abandonando los actos y enfrentando para dejar atrás las realidades tan presentes en la actualidad como la aporofobia o la no reciprocidad lógica y siendo el cambio que queremos ver en la sociedad.

Bibliografía

Cortina, Adela. (2018) Aporofobia, el miedo a las personas pobres. https://www.youtube.com/watch?v=ZODPxP68zT0

Duque, Ana Lucia. (2017). Ética contra la cultura del privilegio y la trampa. En, https://etnicografica.wordpress.com/wp-content/uploads/2020/05/cultra-del-privilegio-y-de-la-trampa002.pdf

Dussel, Enrique. (2017). Enrique Dussel Clase de Ética. En, https://www.youtube.com/watch?v=dDZxrRtOqpk

Mardi, Paul. (Productor) y Muccino, Gabriele (Director). (2006). En busca de la felicidad. (Cinta cinematográfica) Estados Unidos: Colombia Pictures.

Osorio, José Álvaro. (2019) Siempre firme Ser feliz Soñar Soltar los miedos Causa y efecto Vives lo que sueñas La vida es perfecta Todos tenemos sólo lo que trabajamos. La suerte no existe La pobreza es mental Etc.. etc. Y tantas hp locuras que desde niño pasaban por mi mente. Que yo las viví y comprobé y tú las creíste y estás feliz. Gracias gracias gracias. El club de los sueños. https://www.instagram.com/p/BxAglBGH_tO/?utm_source=ig_embed

Savater, Fernando.(1991). Ética para Amador. En, https://etnicografica.wordpress.com/wp-content/uploads/2020/09/fernando_savater_etica_para_amador.pdf

Sztajnszrajber, Dario.(2014). Mentira la verdad-el otro. En, https://www.youtube.com/watch?v=-5jXIkjG0Tk

Zuleta, Estanislao. (1980). El elogio de la dificultad. En, https://etnicografica.wordpress.com/wp-content/uploads/2020/10/elogio-a-la-dificultad-de-estanislao-zuleta.pdf

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